El gerente se puso en contacto con Ángel David Bohórquez, enfermero del dispositivo de cuidados críticos y urgencias que persigue que Ubrique sea el municipio más seguro ante paradas cardiorrespiratorias. Su ambición, junto a la idea de Antonio González, le ha llevado a instalar incluso uno de estos aparatos en una pescadería, la única en Andalucía y probablemente en España que cuenta con él.
Además de gestionarle la instalación del desfibrilador, Ángel David imparte el curso para conocer el funcionamiento y proporciona todos los elementos identificativos para un aparato que está a disposición de todo el mundo. Más aún cuando se encuentra en una intersección con mucho tráfico.
El proyecto surgió en 2008 de la mano de Ángel David y avanza paso a paso para convertir a Ubrique en Ciudad Cardioprotegida, no sólo instalando desfibriladores sino formando al mayor número de vecinos ante situaciones de paro cardíaco. Asegura que su mayor reto es que si un día se da una situación, haya alguien cerca con la capacidad y los medios de salvar una vida.
Con la colaboración del Ayuntamiento, hay lugares como los coches de la Policía Local, la Piscina Municipal y otras instalaciones deportivas que cuentan ya con desfibriladores, algunos de ellos que existían pero que no se utilizaban. Mientras sigue empeñado en su labor en Ubrique, ya ha iniciado el proceso en otros puntos para conseguir lo mismo en la Sierra de Cádiz.
Desde hoy, los clientes de la pescadería de Antonio González y los turistas de la Sierra de Cádiz ya tienen un motivo más para venir.
