Apenas 30 minutos necesita Cruz Roja Española para desplegar un dispositivo de primera acogida a los migrantes que llegan a las costas españolas. Aunque la institución todavía no ha recibido un aviso oficial para preparar la primera atención de los migrantes del Open Arms que lleguen a España en el buque Audaz –15, según ha avanzado el Gobierno–, no necesitarían demasiado tiempo para tenerlo listo. Si bien, prevén que la primera acogida será «rápida» pues ya no precisarán seguramente una «atención de urgencia».
«Nos daría tiempo a preparar lo que fuera. Depende de la instalación del puerto donde vayan a llegar, si fuera necesario sí (montaríamos tiendas de campaña), sin mayor problema o, si no, se utilizaría alguna edificación que tenga el puerto. Nuestra presencia seguramente se daría pero la intensidad de la atención es diferente», ha explicado a Europa Press el técnico de la Unidad de Emergencias de Cruz Roja Española, Antonio Fernández Vicente.
Desde la institución prevén que en este caso, el paso por el puerto será bastante más rápido que en otras ocasiones anteriores porque los migrantes «seguramente» ya no lleguen en una situación «de atención de urgencia» sino recuperados tras una semana recibiendo atención en Italia. En todo caso, tendrán que verificar en qué estado acceden.
«Si pasa una semana ó 10 días, estas personas en este centro de Italia se habrán recuperado desde el punto de vista personal y de salud, más los días que puedan tardar en hacer su entrada a España, seguramente ya no estaremos en una situación de atención de urgencia», ha apuntado Fernández Vicente.
Según ha precisado, los migrantes del Open Arms probablemente lleguen a España más bien «con problemas del bagaje, de lo que haya supuesto su tránsito hasta las costas de Libia y de los días en el barco». Si bien, ha insistido en que estos días en el centro de atención de Italia les van a servir para «recuperarse y coger fuerzas».
CASI DIRECTAMENTE A LOS CENTROS DE ACOGIDA
«Con lo cual, probablemente su llegada en tránsito por las instalaciones del puerto sea muy rápida y directamente vayan a los centros donde se les vaya a dar acogida», ha señalado. Dicho sistema nacional de acogida está gestionado por la Secretaría de Estado de Migraciones y distintas entidades, entre ellas, Cruz Roja, ofrecen un número de plazas de acogida.
El técnico de la Unidad de Emergencias de Cruz Roja Española ha apuntado que probablemente sería la primera vez que se da una circunstancia como esta, en la que un barco llega a puerto español con personas rescatadas en el mar pero que han pasado previamente por otro puerto, con tanto eco mediático.
De esta forma, sería una acogida distinta a la que se hizo con el Aquarius, que llegó hace un año a Valencia con 629 migrantes a bordo, o a la que se realizó cuando el Open Arms llegó al puerto de Barcelona en julio de 2018 con 60 personas rescatadas, pues en ambos casos los migrantes no habían pisado tierra desde su rescate en el Mediterráneo.
Para asistir a estos migrantes que llegan a las costas españolas o a las islas, Cruz Roja Española cuenta con una estructura de gestión formada por un centenar de trabajadores y cerca de 2.500 voluntarios entre los que se encuentran médicos, enfermeros, intérpretes o conductores de ambulancia.
60.000 PERSONAS ATENDIDAS EN 2018
En 2018, atendieron a 60.000 personas que accedieron a España a través de la frontera marítimo terrestre, el número más elevado desde 2004, año desde el que tienen registros. En lo que va de 2019 han atendido a 15.000, lo que supone «un descenso considerable». El programa de atención a inmigrantes en costas españolas, que llevan a cabo desde 2003, está subvencionado por la Secretaría de Estado de Migraciones.
Según ha explicado Antonio Fernández Vicente, la atención que prestan está muy vinculada al momento de la llegada y a las condiciones del viaje. También depende de si han sido interceptados en el mar (más del 90% de los casos), si llegan en una patera directamente a una playa o si han saltado la valla.
En estos dos últimos casos que son «menos habituales», suelen encontrarse con «una situación de urgencia» en la que se requiere «inmediatez». «Vienen heridos en caso de los saltos de valla o con hipotermia porque han caído al agua o entumecidos porque van muchos en un espacio muy reducido o con quemaduras porque se mezcla el combustible con el agua de mar y hace una reacción química», ha indicado.
ROPA SECA Y ALGUNA BEBIDA ENERGÉTICA
Si bien, ha comentado que la situación más frecuente es la llegada de migrantes interceptados en el mar y que llegan a puerto. «Atendemos la situación de salud, se les da ropa seca, alimentos, bebidas calientes y algún alimento energético para que se recuperen», ha explicado. Pasado un breve espacio de tiempo se hacen cargo las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, para atender su situación administrativa.
Cruz Roja puede proporcionar esta primera atención en tiendas de campañas que son capaces de montar en 30 minutos si se trata de llegadas inesperadas o en unos centros estables cuyo desarrollo están completando y que cuentan con zona de recepción, zona de curas, duchas, aseos y climatización.
Ante el gran número de llegadas del año pasado, decidieron ampliar el número de estos centros y su capacidad. Estas construcciones modulares se pueden encontrar en Málaga, Motril, Almería y, próximamente, en Barbate.
Una vez realizada esta primera atención, los migrantes son llevados a los centros de acogida donde se les ofrece una atención integral y donde pueden permanecer un periodo amplio de tiempo. Dependiendo del nivel de ocupación de plazas en la comunidad en la que desembarquen los migrantes, son distribuidos a otras comunidades autónomas. También se tiene en cuenta el origen de las personas, si son unidades familiares o mujeres solas, entre otras características, para dirigirlos a centros especializados.