El vicepresidente de la Junta de Andalucía y portavoz de Cs en Andalucía, Juan Marín, ha lamentado este miércoles que Pedro Sánchez «nunca ha querido acuerdos» para formar gobierno y ha señalado que volver a las urnas lleva a lo que puede «ser un escenario de la tormenta perfecta».
Marín se ha referido así a la previsible repetición electoral el 10 de noviembre, incidiendo en que ha faltado «consenso» para formar gobierno, en vez de volver a las urnas, después de que Pedro Sánchez este pasado martes le dijera al Rey, ha agregado, que «no iba a tirar para adelante».
Para el vicepresidente y consejero de Turismo, Regeneración, Justicia y Administración Local, en Andalucía se ha conformado un Gobierno del cambio «serio, flexible, pero capaz fundamentalmente de llegar a acuerdos a través del diálogo», lo que «ha faltado a nivel nacional».
Ha considerado necesario «agotar» todas las vías de diálogo «posibles», ante el «hartazgo» de millones de españoles que no quieren volver a las urnas en el ámbito nacional.
«Comprendo el hartazgo, porque yo también lo siento, de millones de españoles que no queremos ir a las urnas», ha afirmado Juan Marín, en referencia a la situación política de España.
«Sánchez nunca ha querido acuerdos», ha señalado Marín, para quien el presidente del Gobierno en funciones «siempre ha querido elecciones», al no aceptar «la mano tendida de Unidas Podemos»
Por otro lado, a Cs Sánchez le pedía «una abstención» y el presidente de la formación naranja, Albert Rivera, la ofrecía el lunes, ante lo que el presidente del Ejecutivo en funciones «no ha querido ni siquiera sentarse a la mesa para hablar de ella», ha agregado el vicepresidente de la Junta, para quien el previsible adelanto electoral tendrá «consecuencias desgraciadamente negativas».
En este contexto, ha agregado que el Gobierno andaluz está «preparado», con una comunidad autónoma con «velocidad de crucero», en la que sus dirigentes no van a «entrar en la pelea política».
«TORMENTA PERFECTA»
Mientras tanto, a Pedro Sánchez, en opinión de Marín, «no le ha temblado el pulso para lo que puede ser la tormenta perfecta». En este sentido, ha enumerado que hay un Gobierno en funciones desde hace un año, unos Presupuestos prorrogados, y un posible «Brexit duro», en un escenario de economía europea en recesión, con pérdida de confianza de los mercados, y de lucha comercial entre EEUU y China.
El portavoz de Cs se ha preguntado si «no tendría que haberse impuesto el diálogo», y haber «intentado dar una pequeña prórroga de unos días» pues «el precio va a ser demasiado alto para España».
