El Servicio Andaluz de Salud (SAS) ha firmado con la Sociedad Andaluza de Radiofísica Hospitalaria (SARH) un protocolo general de actuación que establece un marco adecuado para la creación y desarrollo de espacios específicos de colaboración con el objetivo de obtener los mejores resultados en salud para la ciudadanía, mejorando la atención radiológica y el tratamiento con radiaciones ionizantes en la comunidad.
A tal fin, ambas partes reconocen como «grandes líneas estratégicas» del Sistema Sanitario Público de Andalucía (SSPA) la gestión por procesos asistenciales priorizados y de las competencias profesionales, así como la articulación transversal de áreas críticas priorizadas a través de los planes integrales de salud, según recoge este martes un comunicado de la Consejería de Salud y Familias.
La Junta de Andalucía ha explicado a través de un comunicado que este protocolo también contempla el establecimiento de estrategias conjuntas que, con criterios de transparencia y equidad, permitan la planificación «eficaz y eficiente» de los recursos y los servicios sanitarios específicos de su especialidad o especialidades en la sanidad pública andaluza, concediendo prioridad «máxima» a la orientación a los resultados en salud, la seguridad de los pacientes y la evidencia científica.
Igualmente, el acuerdo establece la posibilidad de trabajar en programas y acuerdos de colaboración específicos para el desarrollo profesional, la formación continua, la investigación, desarrollo e innovación, la transferencia tecnológica, el uso adecuado de fármacos, de recursos y tecnologías y el desarrollo de la protección radiológica.
El director gerente del SAS, Miguel Ángel Guzmán, ha puesto en valor la apuesta del Gobierno andaluz por que la sanidad pública andaluza «disponga de la mejor información diagnóstica por imagen que la tecnología actual pueda ofrecer, con la mayor seguridad para el paciente y buscando el desarrollo sostenible». «Buscamos conseguir la excelencia diagnóstica y posicionar a Andalucía como la región europea con los niveles de radiación más optimizados en los equipos», ha apostillado.
Por su parte, el presidente de la SARH, Florencio Javier Luis Simón, ha destacado la implicación de la sociedad y socios, en su mayoría profesionales de la sanidad pública andaluza, por «mejorar» la atención radiológica en Andalucía a través de este convenio «y de cualquier otra acción que podamos poner en marcha, dada la importancia de contar con la experiencia de los especialistas en esta materia para la puesta en marcha de los proyectos que el SAS tiene pendientes».
El proyecto Huella de Energía del SAS es una de las líneas de trabajo, cuya inversión alcanza los 40 millones de euros, en el que los facultativos en radiofísica han colaborado de forma directa facilitando la instalación y calibración de los equipos y poniendo en marcha la red de gestión dosimétrica que permite la optimización y control de las dosis recibidas por los pacientes en relación con su proceso diagnóstico.
Desde junio de 2020 se han instalado 69 equipos de altas prestaciones que registran los datos de forma centralizada en el centro Andaluz de Diagnóstico por Imagen, en el que se monitoriza la calidad de imagen, la optimización de protocolos y se realiza seguimiento de la dosis radiológica.
La Junta de Andalucía también ha puesto de relieve la apuesta por la protonterapia. El consejero de Salud y Familias, Jesús Aguirre, ya anunció el pasado noviembre que los dos equipos de protonterapia donados por la Fundación Amancio Ortega irán destinados al Hospital de Emergencia Covid-19 de Sevilla y al Hospital Regional Universitario de Málaga, concretamente al Materno Infantil.
Además de estos dos equipos, la Fundación ha donado ocho más a otras siete comunidades autónomas por un valor de 280 millones de euros. Por su parte, la inversión de la Junta en ambos proyectos alcanzará un total de 10,6 millones de euros, que se añaden a la aportación de la entidad.
Estos dos equipos van a ayudar a Andalucía a contar con uno de los tratamientos «más novedosos» contra el cáncer, permitiendo tratar de forma muy específica determinados tipos, especialmente en población infantil. Los especialistas en Radiofísica han sido «claves» en el desarrollo de esta propuesta, al impulsar desde la SARH la publicación del Libro Blanco de la Protonterapia en Andalucía que está permitiendo la gestión «eficaz» del diseño de implantación. La protonterapia en Andalucía es un proyecto a largo plazo «lleno de retos a resolver» a través de equipos multidisciplinares de trabajo.
Actualmente está en desarrollo el Plan de Inversión en Equipos de Alta Tecnología en el que Andalucía renovará 137 equipos de alta tecnología, entre aceleradores lineales, PET-CT, Spect, CT, resonancia magnética y equipos de hemodinámica e intervencionismo. La mayor parte de estos equipos requieren de su adecuación para uso clínico y de trámites de legalización en los que la intervención del radiofísic
