El Tranvía de la Bahía de Cádiz, que gestiona la Consejería de Fomento a través de la Agencia de Obra Pública, va a incorporar en su trazado la tecnología Navilens para hacer más accesible el transporte a las personas con discapacidad visual
En la actualidad, una persona con discapacidad visual puede acceder al Trambahía sin encontrar barreras físicas. Además, las máquinas validadoras y otros dispositivos de interacción directa están adaptados al sistema Braille. Sin embargo, se enfrenta todavía a una importante falta de información visual, según ha informado la Junta.
La tecnología Navilens resuelve esta problemática a través de la visión artificial y una app móvil, que permite a un invidente localizar las puertas de salida de los trenes, paradas, máquinas expendedoras y otras señales visuales diseñadas para ser vistas a distancia y que escapan al control de las personas con discapacidad.
En primer lugar, hay que generar una marca visual, similar a un código QR pero con una combinación de colores básicos, que contiene un mensaje codificado. En segundo lugar, este mensaje se recoge y descodifica a través de una app instalada en el teléfono móvil que reproduce una señal audible. Además, la app permite mostrar la información como realidad aumentada para los usuarios con discapacidad visual. Este proceso de creación de los mensajes asociados a los códigos Navilens para su posterior producción se llevará a cabo en el plazo de doce meses.
En el Trambahía se van a instalar códigos Navilens en las paradas, que informarán sobre el nombre de la parada, el sentido de la circulación del tranvía, así como la situación de las máquinas expendedoras y validadoras. En el interior de los trenes, también se colocarán estos códigos para informar sobre las puertas con apertura.