El Consejo de Administración de Aguas de Cádiz se reunirá este viernes, 8 de mayo, para aprobar una serie de medidas «que ayuden a paliar el negativo impacto económico y social que está teniendo la crisis ocasionada por el coronavirus en el tejido empresarial de la ciudad de Cádiz», según la presidenta de Aguas de Cádiz, Ana Fernández, quien ha añadido que «son conscientes de las dificultades y comparten la preocupación por la situación económica, por lo que van a hacer un esfuerzo dentro de sus propias posibilidades financieras sin que se ponga en riesgo la viabilidad ni el futuro económico de la empresa municipal de agua».
Una de las medidas consiste en aplicar a empresas, trabajadores autónomos y asociaciones socioculturales una reducción de la factura de los servicios de abastecimiento de agua, saneamiento y depuración equivalente al importe de las cuotas fijas de la factura durante la vigencia del estado de alarma, así como durante el periodo de escalonamiento que determine el Gobierno para la vuelta a la actividad de cada una de las distintas actividades económicas afectadas por la crisis. Esta medida tiene efecto retroactivo y los destinatarios que lo soliciten deberán haberse visto afectados por una paralización o reducción significativa de su actividad desde la declaración del estado de alarma.
Estos sectores económicos podrán, asimismo, solicitar descuentos en las facturas correspondientes al alta en el servicio de suministro de agua con lo que no tendrán que abonar el importe equivalente a los derechos de contratación si han solicitado la baja del contrato de suministro durante el estado de alarma o durante el periodo en el que no se autorice la vuelta a la actividad.
Asimismo, Aguas de Cádiz recuerda que la empresa no cortará el suministro de agua por impago en ningún domicilio de la ciudad por problemas económicos justificados o en el que las familias se encuentren en riesgo de exclusión social. En este sentido, Aguas de Cádiz va a ampliar de 300.000 a 400.000 euros anuales la partida destinada al programa del Suministro Mínimo Vital, dirigido a personas que no puedan hacer frente al pago de los recibos del agua. Además, al margen de esta medida, siguen vigentes el resto de mecanismos habilitados para paliar los problemas transitorios económicos como los aplazamientos, los fraccionamientos y los planes de pagos personalizados.