El alcalde de Arcos de la Frontera, Isidoro Gambín, ha visitado el Cementerio San Miguel para comprobar la finalización de la primera fase de ampliación del mismo de las tres que hay contempladas. La escasez de nichos y columbarios han movido al Ayuntamiento arcense a diseñar estas mejoras.
La primera fase de ampliación del Cementerio municipal de Arcos es ya una realidad. Un cementerio donde sólo había disponibles 125 nichos y 45 columbarios, lo que supone una problemática teniendo en cuenta que en la localidad serrana se producen entre 200 y 230 muertes al año.
Esta primera fase ha incluido trabajos de demolición de la valla actual, red de recogida de aguas pluviales, viarios de distribución interna y la sustitución de puerta trasera de acceso al recinto. Con esta obra, que ha tenido un presupuesto de 175.000 euros, se dispone de manera inmediata de 345 nichos más y 42 columbarios.
