La Sección Séptima de la Audiencia de Barcelona ha condenado a 12 años de cárcel a un hombre por agredir con una piedra de grandes dimensiones, lanzar piedras y dar una patada en la cabeza a un homosexual en Sitges y dejarlo abandonado cuando cayó a las vías de la estación de tren.
El tribunal condena a Abdelhakim E.H. por un delito de homicidio en grado de tentativa y por robo con violencia con los agravantes de abuso de superioridad y cometer el delito por la orientación sexual de la víctima, y, además de prohibirle acercase a la víctima por el plazo de nueve años, le exige pagar una indemnización de más de 21.000 euros, publica ABC.
La sentencia declara probado que, sobre la medianoche del 1 de octubre de 2016, la víctima se cruzó con un grupo de personas al salir de un local de ambiente gay de Sitges y se burlaron de él, y después, al ir a la estación de tren para regresar a casa, dos de ellos fueron a «darle un palo».
El acusado y un menor –que ya fue condenado por esto– se sentaron en el mismo banco que el denunciante, que se había dormido, y le dijeron ‘te vamos a asaltar’, y el condenado le golpeó en la cabeza con una piedra de grandes dimensiones que le hizo caer al suelo, donde fue golpeado por ambos con piedras cogidas en las vías y el procesado también le propinó una fuerte patada en la cabeza.
HABLARON DE LAPIDACIÓN
«Mientras ello ocurría, el menor decía que lo mataría a pedradas como se hacía en su país con los maricones», unas expresiones que recordó la víctima durante el juicio que tuvo lugar en la Audiencia el 7 de marzo, donde declaró con los acusados detrás de un biombo y visiblemente afectado.
Aprovechando que estaba aturdido, le robaron sus pertenencias, el teléfono móvil, el cargador, 60 euros y documentación y abandonaron el lugar riéndose, mientras que la víctima, debido a su estado, caía a las vías y era rescatado por testigos dos minutos antes de que pasara el tren.
La fiscal pedía para Abdelhakim E.H. 13 años y medio de prisión por un delito de homicidio en grado de tentativa y robo con violencia con uso de instrumento peligroso y la acusación particular, que representa a la víctima, y la popular en nombre del Ayuntamiento de Sitges solicitaban 14 años y medio por los agravantes de abuso de superioridad y discriminación por la orientación sexual (que el tribunal ha aceptado).