El Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial (CDTI) y la Universidad Politécnica de Madrid (UPM), forman parte del grupo de trabajo CS3PG que trabaja en un proyecto europeo para lograr la neutralidad de la aviación europea de aquí a 2050.
El Programa Estratégico de Investigación e Innovación e Innovación para una Aviación Limpia está desarrollando las bases para el desarrollo de la iniciativa Clean Aviation en el marco del futuro programa de I+d+i de la UE que se llamará Horizonte Europa y que vienen a sustituir y dar continuidad respectivamente a los programas Clean Sky 2 y H2020.
En el grupo de trabajo participan también representantes de compañías y centros de investigación del sector aeronáutico como de los 27 Estados miembro (de España participa el CDTI) e investigadores de las universidades de Delft, la Universidad de Stuttgart, la Universidad de Patras y la Universidad Politécnica de Madrid, que participa a través de la asociación PEGASUS de la que es miembro fundador y que actualmente preside Gustavo Alonso, profesor de la Escuela Técnica Superior de Ingeniería Aeronáutica y del Espacio (ETSIAE) de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM).
La Ley Europea del Clima tiene como objetivo una Unión Europea neutra en carbono en 2050, es decir, con emisiones netas cero de gases de efecto invernadero. Así, la aviación puede liderar un sistema neutral para el clima, establecer nuevas normas mundiales para un transporte aéreos seguro, fiable, asequible y limpio.
«La comunidad aeronáutica europea está lista y comprometida a actuar ahora para trabajar en pro de una aviación neutra desde el punto de vista climático y, simultáneamente, establecer un liderazgo industrial crucial para Europa y sus ciudadanos», sostiene el grupo de trabajo seleccionado para definir la hoja de ruta de un programa estratégico de investigación e innovación para una Aviación Limpia (bautizado como Clean Aviation), del que forma parte la Universidad Politécnica de Madrid (UPM).
En ese sentido, el grupo considera que el reto de la aviación neutra en términos climáticos a la que se enfrenta el sector aeronáutico va a suponer una revolución en las tecnologías utilizadas para el desarrollo de las aeronaves y sus sistemas de propulsión, que cambiarán radicalmente respecto al modelo que, aunque con muy importantes mejoras de carácter evolutivo, llevamos viendo durante décadas.
El grupo ha definido una Agenda Estratégica de Investigación e Innovación (SRIA) para abordar los posibles retos y objetivos de Clean Aviation. SRIA será el documento en el que se basen las actividades de I+d+i de Clean Aviation. Su primer borrador se acaba de publicar y estará sometido a dos fases de consulta pública hasta el 11 de junio.
El proyecto cuenta con dos horizontes, uno en 2030, con la demostración e introducción de conceptos de aeronaves de bajas emisiones que aprovechen los resultados de la investigación de la aviación no contaminante con comustibles sostenibles y optimizar las operaciones «verdes» para que las innovaciones se puedan ofrecer a las líneas aéreas y los operadores para 2030 para que entre en servicio entre 2030 y 2035.
El escenario final, en 2050, con una aviación neutral para el clima, mediante la explotación de tecnologías futuras maduradas más allá de la fase de aviación limpia, junto con el pleno despliegue de combustibles de aviación sostenibles y de energía alternativa.