Las ONG ambientales Amigos de la Tierra y Greenpeace han celebrado la convalidación del Real Decreto que pone fin al impuesto al sol este jueves en el Congreso de los Diputados, que supone una «vuelta a la sensatez» y el fin de una situación que ha lastrado «el boom» del autoconusmo en España, de modo que consideran que este es «un gran día» para la sociedad y piden el fin de las subvenciones a las «grandes empresas contaminantes».
Tras la votación parlamentaria, Amigos de la Tierra ha anunciado que pedirá al Gobierno que trasponga a principios de 2019 la nueva Directiva Europea de Renovables para terminar de apuntalar la revolución renovable en España.
Amigos de la Tierra celebra así la derogación del impuesto al sol así como la eliminación de los peajes y los cargos que «han lastrado el boom del autoconsumo» en España estos años así. También valora que se simplifiquen los trámites y que se abra la puerta al autoconsumo compartido.
El grupo ecologista espera ahora que empiecen a multiplicarse las iniciativas renovables de energía comunitaria. Para el responsable de clima y energía de la ONG, Héctor de Prado, este es «un gran día» para la sociedad porque la decisión tomada en el Congreso e los Diputados, a su juicio, permitirá avanzar «más rápido hacia una sistema energético descentralizado y renovable» y asume como tarea «abrir dicho sistema a la participación ciudadana».
Por su parte, Greenpeace pide también al Congreso de los Diputados que ponga fin a las subvenciones a las grandes empresas contaminantes y acabe con los abusos del mercado.
La responsable de la campaña de energía y cambio climático de Greenpeace, Sara Pizzinato, destaca que es «una gran victoria» terminar con las barreras al autoconsumo porque cuando las personas luchan contra el cambio climático «deberían ser premiadas, no penalizadas».
Sin embargo, observa que ahora es necesario que el Congreso se comprometa a no modificar la parte relativa al autoconsumo en la tramitación del Proyecto de Ley que parte de la base del real decreto ley aprobado.
Asimismo, subraya que también se deberá reconocer «de forma justa» el valor de la electricidad que generen los autoconsumidores para acelerar la reducción de las emisiones de CO2 y reducir la factura de la luz para todos los hogares.
En este contexto, la ONG también valora la propuesta de la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, para que la fijación de las tarifas eléctricas y del gas pasen a ser competencia del organismo regulador.
Por ello, insta a la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia que establezca una metodología clara para el cómputo de los costes del sistema y su reparto entre los consumidores. La medida deberá ir acompañada de un ejercicio profundo de transparencia y participación ciudadana.
Finalmente, pide al Congreso que introduzca una reforma fiscal ambiental y que acabe con las subvenciones a las grandes empresas contaminantes y con los abusos del mercado.
«Abaratar artificialmente el carbón, el gas, el petróleo y el uranio mediante subvenciones mantiene la dependencia desproporcionada a un sistema energético obsoleto, contaminante, peligroso y caro para la ciudadanía», ha añadido Pizzinato.