El sector turístico pierde un millón de puestos de trabajo al día en todo el mundo como consecuencia de la crisis del coronavirus, según ha alertado el Consejo Mundial de Viajes y Turismo (WTTC, por sus siglas en inglés).
La organización internacional, que representa al sector privado a nivel global, indica que las pérdidas de empleos afectan a todos los niveles de la industria y aumentan su ritmo a medida que los países adoptan medidas restrictivas para evitar la propagación del virus.
En total, consideran que la crisis ha puesto en «riesgo inmediato» 50 millones de puestos de trabajo, mientras que 320 millones de empleos se «enfrentan al impacto de la pérdida de negocios».
El WTTC señala que el cierre de hoteles, la suspensión de vuelos, la paralización de los cruceros y el cierre de fronteras están teniendo un «catastrófico efecto dominó» que impacta a un gran número de proveedores en todo el mundo, donde las pequeñas y medianas empresas, como los operadores turísticos, los agentes de viajes y los comerciantes únicos, son «especialmente vulnerables».
En el WTTC, que ya está trabajando con más de 75 gobiernos, documentando y monitorizando las soluciones que están implementando para reducir el impacto social, ha pedido a los países que realicen «urgentemente mayores esfuerzos» para analizar cómo las empresas pueden acceder a créditos sin intereses y exenciones fiscales que puedan evitar un colapso inminente.
El consejo es consciente de que «mientras el sector de viajes y turismo se enfrenta a una crisis económica», la pandemia de coronavirus es «un desastre de salud global», por lo que los gobiernos están haciendo todo lo posible para contener la propagación y reducir el número de muertes.
La presidenta y consejera delegado del WTTC, Gloria Guevara, ha señalado que temen que la situación «se deteriore a menos que los gobiernos tomen más medidas para abordarla» y ha destacado que, aunque muchos gobiernos han «prometido ayudas», la mayoría de las empresas «aún no tienen idea de cómo acceder a estos préstamos».
El WTTC ha redactado un plan para que los gobiernos puedan combatir el efecto del coronavirus en la economía que pasa por «proteger los salarios, ingresos y empleos» en riesgo, «otorgar préstamos vitales, ilimitados y sin intereses» y «eliminar los aranceles e impuestos para los pasajeros y la industria de viajes con efecto inmediato» y durante un año.