El consejero de la Presidencia, Interior, Diálogo Social y Simplificación Administrativa, Antonio Sanz, y el alcalde de Cádiz, Bruno García, han mantenido una reunión para avanzar en los trabajos para la elaboración del Plan Local de Maremotos de la capital gaditana, que da continuación al Plan de Emergencia ante el riesgo de maremotos en Andalucía aprobado el 12 junio de 2023 y que será el primero a nivel local de la Comunidad.
Sanz ha incidido en que Andalucía «está a la vanguardia de los servicios de emergencia del país» al mismo tiempo que ha destacado que «ha sido la primera comunidad autónoma de España en tener un Plan de Emergencia ante el Riesgo de Maremotos, dotando así de una mayor seguridad a los más de 800 kilómetros de costa y más de 500 playas repartidas en 62 municipios».
En un comunicado, la Junta ha destacado que Andalucía se encuentra entre las comunidades autónomas con mayor riesgo de terremoto, aunque puede considerarse como moderado en una escala global, ha señalado la Junta, que ha añadido que la posibilidad de que un terremoto pueda producir un maremoto que afecte a las costas está avalada por el conocimiento científico y la propia historia. El terremoto de Lisboa de 1755 vino sucedido por un maremoto que azotó la costa onubense y gaditana.
Por su parte, el alcalde de Cádiz ha explicado que el plan responde a «un ejercicio de responsabilidad que se hace de forma coordinada con la Junta y que aspira a estar homologado» por la administración andaluza tras su presentación en el mes de julio.
La mayor dificultad para la realización del Plan de Maremotos ha estado en la elaboración de análisis del riesgo, según la Junta, que ha indicado que se trata de un trabajo llevado a cabo desde la Dirección General de Emergencias y Protección Civil con el soporte técnico del personal funcionario y técnicos del Grupo de Emergencias de Andalucía (GREA) y la cooperación de Copernicus, a través de un proyecto dirigido conjuntamente por la Agencia Espacial Europea (ESA) y la propia Unión Europea.
Las provincias más afectadas por un maremoto serían Huelva y Cádiz, así como la zona costera definida entre Ayamonte y Tarifa que comprende 22 municipios, diez de ellos de la provincia de Huelva (Ayamonte, Isla Cristina, Lepe, Cartaya, Punta Umbría, Huelva, Palos de la Frontera, Moguer, Lucena del Puerto y Almonte), a los que hay que sumar otras 12 poblaciones gaditanas (Sanlúcar de Barrameda, Chipiona, Rota, El Puerto de Santa María, Puerto Real, San Fernando, Cádiz, Chiclana de la Frontera, Conil de la Frontera, Vejer de la Frontera, Barbate y Tarifa).