La Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible ha informado este martes al Consejo de Gobierno de que próximamente abrirá una nueva convocatoria de ayudas para el desarrollo sostenible de la pesca y la acuicultura en Andalucía con un presupuesto de más de 15 millones de euros en el marco del Programa Operativo del Fondo Europeo Marítimo y de Pesca (2014-2020).
Estas subvenciones persiguen «fomentar una actividad respetuosa con el medio ambiente y las pesquerías, más eficiente en el uso de los recursos, innovadora, competitiva y basada en el conocimiento», según se detalla en la referencia del Consejo de Gobierno, en la que se señala que estas características «entroncan directamente con los objetivos básicos de la Política Pesquera Común (PPC) de impulsar una flota profesional y económicamente rentable que garantice un aprovechamiento óptimo sin poner en riesgo el equilibrio biológico».
En el caso de los incentivos para la acuicultura sostenible, el Gobierno andaluz destina 14 millones de euros a «impulsar la competitividad, promoción y diversificación de las empresas para ayudar al sector andaluz a encontrar soluciones a los desafíos actuales que debe enfrentar».
Estas ayudas de 2022 son, según la Junta, «un ejemplo del compromiso del actual Ejecutivo andaluz con el sector», ya que se trata de la sexta convocatoria que se pone a disposición del sector «en solo tres años y medio», según destaca el Gobierno de PP-A y Ciudadanos (Cs), desde donde se apostilla que, por el contrario, en los cinco años anteriores al inicio de la presente legislatura, «se abrieron únicamente dos convocatorias para respaldar la acuicultura andaluza».
Estas subvenciones, que pueden alcanzar hasta el 50% de las inversiones productivas que realizan las pymes y hasta el 30% para las grandes empresas, respaldan proyectos de mejora en explotaciones acuícolas marinas y continentales de Andalucía como, por ejemplo, la ampliación o la construcción de las instalaciones, la recuperación de estanques o lagunas existentes y mejoras relacionadas con la salud y el bienestar de los animales.
Asimismo, entre otras iniciativas, también facilitan el desarrollo de actividades complementarias vinculadas a la actividad acuícola principal que permitan diversificar los ingresos de las empresas como proyectos de turismo de pesca deportiva o actividades educativas.
Por otro lado, las ayudas para fomentar el ejercicio de una actividad pesquera respetuosa con el medio ambiente cuentan con más de un millón de euros de presupuesto y pueden alcanzar hasta el 50% de las inversiones que realiza el sector.
Estos incentivos se destinan, entre otros fines, a respaldar a los jóvenes de hasta 40 años que han trabajado como pescadores al menos cinco años o que cuentan con un título profesional de este sector y que ahora deciden comprar su primer buque para poner en marcha nuevas empresas dedicadas a la actividad pesquera.
Además, estos incentivos respaldan también la mejora de la higiene, la salud, la seguridad y las condiciones de trabajo de los pescadores a bordo de barcos que tienen su puerto base en Andalucía; así como la reducción del impacto de la pesca en el medio marino a través, por ejemplo, de equipos que reduzcan las capturas no deseadas de poblaciones comerciales.
Asimismo, las ayudas para la pesca sostenible de la convocatoria 2022 se dirigen también a promocionar la eficiencia energética y la mitigación del cambio climático, la sustitución o modernización de los motores de esta flota y la mejora de la calidad de los productos pesqueros a través de la innovación en equipos de conservación y clasificación de las capturas.
Según detalla la Junta, en Andalucía se producen más de ocho millones de kilos de pescados y mariscos procedentes de la acuicultura marina y continental. En total, las más de cien instalaciones acuícolas de esta comunidad autónoma superan los 70 millones de euros de facturación anual y reúnen a 1.157 trabajadores.
Esta actividad, según resaltan desde el Gobierno andaluz, permite llevar al mercado productos frescos, de alta calidad, saludables y con «excelente garantía sanitaria» que cada vez tienen más demanda por parte de los ciudadanos y de la restauración.
Las instalaciones acuícolas son, además, «referente de sostenibilidad» por su carácter de sumidero de CO2 (carbono azul) y su «alto interés ecológico», ya que, según defiende la Junta, constituyen «verdaderos paraísos para la fauna y flora autóctona y descansaderos para las aves migratorias».
Respecto a la pesca, la flota andaluza está compuesta por más de 1.450 barcos que llevan cada día a las lonjas productos «frescos y de gran calidad capturados con el máximo respeto al medio marino y a la sostenibilidad de las pesquerías para asegurar su mantenimiento futuro», según pone de relieve la Junta, que destaca que, actualmente, viven de esta actividad productiva más de 20.000 familias de la región andaluza.