Profesionales del Área de Gestión Sanitaria Campo de Gibraltar Este (Cádiz) están participando en talleres de prevención de agresiones al personal sanitario, una actividad que corre a cargo de la Unidad de Prevención de Riesgos Laborales (UPRL) y la Guardia Civil y que ha comenzado este jueves en el Centro de Salud de Jimena de la Frontera, para personal de este centro y de Castellar.
Según ha explicado la Consejería de Salud y Consumo en una nota, la iniciativa se enmarca en el Plan de Prevención y Atención a las Agresiones del Servicio Andaluz de Salud (SAS), que entró en vigor en 2020 y pretende encontrar puntos de mejora que redunden en una disminución de los ataques físicos o verbales.
El primero de los talleres se ha celebrado en Jimena de la Frontera para personal de este centro y de Castellar, y la próxima semana se desarrollará en el Centro de Salud Evaristo Domínguez de San Roque.
La actividad tiene como objetivo potenciar las habilidades y dotar de herramientas adecuadas a los profesionales sanitarios para que puedan reconducir situaciones violentas o de agresión en sus centros sanitarios. Es impartido por un sargento de la Comandancia de la Guardia Civil de Algeciras e incluye técnicas de comunicación verbal y no verbal, habilidades sociales, identificación de emociones y comportamientos de riesgo, entre otros temas.
La formación tendrá una segunda parte práctica en la que los profesionales tendrán la oportunidad de presenciar situaciones de agresiones reales, mientras que los agentes les enseñarán técnicas para reconducir estos episodios y evitar que la agresión se acreciente.
La Dirección del Área de Gestión Sanitaria Campo de Gibraltar Este ha agradecido la colaboración de la Guardia Civil en este tipo de talleres «tan importantes» para los profesionales del entorno sanitario, así como la ayuda de todos los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado en la lucha contra las agresiones.
La Delegación Territorial de Salud y Consumo cuenta con una comisión provincial contra las agresiones a profesionales de centros sanitarios. Este instrumento, contemplado en el Plan de Prevención y Atención del Servicio Andaluz de Salud (SAS), pretende encontrar puntos de mejora que redunden en una disminución de los ataques físicos o verbales.
Cuenta con la participación del interlocutor sanitario, el interlocutor y miembros de la Policía Nacional y de la Guardia Civil, la asesoría jurídica y la secretaría general de la Delegación Territorial de Salud y Consumo, los referentes en materia de agresiones de los hospitales, distritos y áreas sanitarias de la provincia y el Centro de Emergencias Sanitarias 061 de la provincia.