La senadora socialista ha entregado al ministro de Transportes y Movilidad las peticiones que se realizan desde la Asociación Empresarial de Transporte de Viajeros en Autobús de la provincia de Cádiz con el fin de que se puedan tomar medidas para paliar la complicada situación
Tras mantener un encuentro con el alcalde de Chiclana y vicepresidente de Diputación, José María Román, y los representantes de la Asociación Empresarial de Transporte de Viajeros en Autobús de la provincia de Cádiz (ASOBUS), Nicolás Rodríguez y José Muñoz, la senadora del PSOE por la provincia de Cádiz, Cándida Verdier, ha entregado al ministro Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, José Luis Ábalos, la propuesta planteada por el sector del transporte público en la que muestra su preocupación por los problemas por los que atraviesa en la actualidad, con el objetivo de que puedan tomar las medidas necesarias para paliar esta complicada situación.
En este sentido, hay que destacar que en la provincia de Cádiz, este sector está compuesto por 60 empresas, con una flota que ronda los 800 autobuses, que dan empleo a unas 1.200 personas y que tiene una vital importancia a la hora de vertebrar y cohesionar el territorio, como sector soporte para el transporte escolar, el turismo y el transporte de los empleados en las grandes empresas, por citar las actividades más visibles. Así, desde ASOBUS han trasladado que el sector se encuentra en una situación crítica, ya que ninguno de los ámbitos de actuación con los que tradicionalmente trabaja goza de salud suficiente como para vislumbrar un futuro optimista.
En cuanto al transporte escolar, no se sabe cómo volverán los alumnos a la actividad escolar, cuáles serán los aforos autorizados de los vehículos, si los contratos serán prorrogados o no y con qué cantidad se indemnizará por el servicio comprometido pero no realizado por causa de fuerza mayor ajena a las empresas”, según ha explicado Verdier, quien ha añadido que “respecto al transporte discrecional, se ha paralizado al cien por cien, ya que está prohibida la movilidad para los colectivos habituales que venían haciendo uso de este tipo de transporte y, por lo tanto, esta actividad ha desaparecido”. “Y con respecto al transporte urbano, el regular y metropolitano, aunque tienen un movimiento testimonial, más por la imposición de mantener los servicios que por el uso real que la población hace, conlleva a un desequilibrio económico brutal”, según ha incidido.
Asimismo, la senadora socialista ha trasladado al ministro otras reivindicaciones del sector como, por ejemplo, bajar el IVA de los servicios de transporte para que se incentive su uso; practicar una moratoria inmediata como se ha hecho en otros sectores con sus cargas financieras para los leasing de los vehículos, los impuestos de circulación o las tasas municipales; o fortalecer y agilizar canales profesionales de la ITV para que sea más rápido y sencillo cumplir con este requisito, que está ligado a la seguridad vial, pero que en ocasiones supone tener un vehículo sin trabajar mucho tiempo.