Cada cigarrillo que fuman al día las personas con mucho hábito tabáquico aumenta el riesgo de contraer algunas enfermedades en más de un 30 por ciento, según un nuevo estudio internacional publicado este viernes en la revista científica ‘EClinicalMedicine’.
El Centro Australiano para la Salud de Precisión, con sede en la Universidad de Australia Meridional, dirigió el estudio, que relaciona el tabaquismo intenso con 28 afecciones de salud distintas, revelando un aumento de 17 veces en el enfisema, de 8 veces en la aterosclerosis (arterias obstruidas) y de 6,5 veces en la incidencia de cáncer de pulmón.
La investigación analizó los datos hospitalarios y las estadísticas de mortalidad de más de 152.483 personas que fuman mucho en el Biobanco del Reino Unido para observar cómo el tabaquismo excesivo afecta a los riesgos de enfermedad.
La investigadora principal, Elina Hypponen, afirma que el riesgo de sufrir enfermedades respiratorias, cánceres y enfermedades cardiovasculares aumenta con cada cigarrillo que se fuma al día.
Los vínculos entre fumar más y el enfisema, las enfermedades cardíacas, la neumonía y los cánceres respiratorios eran particularmente altos, pero los investigadores también encontraron asociaciones con muchas otras enfermedades respiratorias, insuficiencia renal, septicemia, trastornos oculares y complicaciones de la cirugía o los procedimientos médicos.
«El consumo de tabaco es la principal causa prevenible de muerte en todo el mundo y los fumadores suelen morir 10 años antes que los no fumadores. A pesar de la disminución mundial del consumo de tabaco en los últimos 20 años, se estima que el 20 por ciento de la población mundial mayor de 15 años sigue fumando tabaco», resalta Hypponen.
Varias consecuencias conocidas del tabaquismo, incluidos los accidentes cerebrovasculares, no se identificaron en el estudio, en el que solo se contabilizaron los casos superiores a 200 para cada afección de salud. «Solo examinamos la forma en que el tabaquismo más intenso afecta aún más a los riesgos de enfermedad en un grupo de personas que son todas, al menos, ex fumadoras, por lo que, en comparación con los que nunca han fumado, los efectos sobre la salud van a ser aún más notables. Otros factores, como el momento en que las personas empiezan a fumar o el tiempo que llevan fumando, también pueden afectar a las consecuencias para la salud que se derivan del tabaquismo», resalta.