España necesita construir diez centrales nucleares «pequeñitas», es decir, que cuenten con reactores modulares pequeños (SMR), «para evitar en un futuro próximo apagones y una subida notable en la factura de la electricidad», según la presidenta del Comité de Energía del Instituto de la Ingeniería de España, Yolanda Moratilla, que ha intervenido en una mesa redonda de la Real Academia de Ingeniería (RAI).
En vez de cerrar centrales nucleares «lo que debería hacer España es aumentar su número, al igual que están haciendo no pocos países, para continuar con la robustez del sistema eléctrico», ha apuntado la experta.
Además, ha defendido que conseguir la mayor penetración posible de energías renovables «solo se puede hacer con tecnología nuclear», y que «es irracional mantenerse en la posición ideológica del cierre de las centrales nuclear».
Moratilla ha concluido que, si se llevara a cabo el cierre de todas las centrales nucleares en España (previsto para 2035 como máximo), «sería muy perjudicial», por lo que confía en que finalmente se produzca un cambio de posición respecto a las previsiones del cierre de esas centrales.
ACCIDENTES POR CARRETERA DE MERCANCÍAS PELIGROSAS
En esta jornada ha participado también el catedrático y miembro del Comité de Transporte del Instituto de Ingeniería, Antonio Serrano, que ha destacado la «adecuada reglamentación en el transporte de materiales radiactivos», que minimiza al máximo los riesgos de accidentes, aunque «el accidente cero no existe» en ningún transporte.
Los datos muestran que entre el 2000 y el 2022 se registraron una media de 125 accidentes por carretera al año de mercancías peligrosas, «pero en un porcentaje altísimo están ligados a comportamientos inadecuados o fallos en las personas».
Sin embargo, los que necesitan notificación, porque son de cierta magnitud, suelen ser unos 25, «y con una tendencia decreciente».
En ese mismo período, se registraron en España 100 sucesos con materiales radiactivos involucrados, pero en ninguno de ellos «se produjo la superación de los límites legales de dosis de radiaciones radiológicas anuales en trabajadores o público».
Además, sólo en dos tuvo lugar una «exposición resaltable de personas» y en un tercero se registró «una contaminación superficial de una zona».
Por su parte, el nuevo presidente de la Academia, Jaime Domínguez, en el marco de este evento, se ha marcado como reto conseguir una mayor presencia de la institución en la sociedad y que sean capaces de presentar sus opiniones o puntos de vista en distintos problemas técnicos que se crean en la sociedad.