La consellera de Igualdad y Políticas Inclusivas, Mónica Oltra, ha explicado que todas las familias y mujeres de la flotilla del Aquarius que se encuentran alojados en el complejo valenciano de Cheste terminarán de pasar este jueves a centros de acogida de entidades sin ánimo de lucro, sobre todo de Cáritas, y durante la próxima semana lo harán los hombres. Los niños y los adolescentes llevan su programa propio de atención.
Oltra realizó estas declaraciones tras presidir la primera reunión de comisión mixta de Atención y Acogida a Personas Desplazadas y Refugiadas, con la que comienza la segunda Fase de la Operación Esperanza Mediterránea para atender el proceso de acogida de los 630 migrantes. La directora general de Inclusión Social, Inma Carda, se encargará de la coordinación de este proceso junto al Ministerio de Trabajo, Migración y Seguridad Social.
De este modo, con la reunión del martes del Centro de Coordinación Operativa Integrada (Cecopi) se dio por concluida la primera fase de recepción de las personas que llegaron el pasado domingo a bordo del Aquarius, el Dattilo y el Orione, y da comienzo el proceso para buscar emplazamiento de todos los que han solicitado asilo.
Al respecto, ha señalado que se programarán reuniones semanales con las comunidades autónomas y las entidades sin ánimo de lucro que se han ofrecido a acoger a estos migrantes, además de los recursos propios de la Generalitat. La atención se hará priorizando a los refugiados por su vulnerabilidad.
Para ello, este jueves se celebra una reunión con entidades sociales, y este viernes, 22 de junio, con la FVMP, Diputación y Generalitat y entidades de la infancia para ver las plazas disponibles.
La derivación definitiva se hará en coordinación con el Ministerio y se tendrá en cuenta a las 11 comunidades que ya se ofrecieron a acoger refugiados cuando estalló la crisis humanitaria de Siria, a las que se ha sumado Galicia. Asimismo, se ha desplazado un dispositivo de Francia para poder atender las solicitudes de asilo en el país galo ya que muchos de los refugiados ya tienen allí algún familiar.
Oltra ha garantizado que todo el proceso se hará desde un punto de vista «personalizado» y que todos los refugiados estarán siempre acompañados por un traductor y recibirán apoyo psicosocial, además de jurídico.
PERIPLO HASTA VALÈNCIA
El proceso comienza con una entrevista en la que se tratará también de averiguar «el periplo» que han sufrido hasta llegar a València, sobre todo «su travesía por el desierto de Libia, uno de los lugares más peligrosos del planeta donde han muerto más personas que en el Mediterráneo y donde han sufrido todo tipo de penalidades».
Al respecto, Oltra ha aclarado que ninguna de las agresiones sexuales a las refugiadas del Aquarius se produjo en los barcos sino en las travesías previas. Así, en las entrevistas realizadas a las mujeres en el mismo Puerto de València se les preguntaba si habían sufrido algún abuso en los barcos para poder detener a los responsables y no hubo ningún caso.
Algunas de las mujeres que hayan sido víctimas de una violación serán llevadas a centros de acogidas de Mujeres 24 horas para recibir el tratamiento psicológico necesario por parte de especialistas.
Del mismo modo, se van a realizar tres pruebas físicas a los cerca del medio centenar de los 112 niños que están en centros de menores de Alicante sobre los que hay dudas de si son mayor de edad para ofrecerles a aquellos que lo sean la posibilidad de pedir asilo. Estos jóvenes no van a Cheste, sino a centros de ONG directamente ya que aunque tengan 18 años son aún vulnerables. Las pruebas óseas se complementarán con entrevistas de psicólogos para determinar su grado de madurez.
SEIS MESES
Oltra ha destacado que la segunda fase es «más o igual de importante» que la primera para seguir manteniendo «el estándar de calidad de este operativo» que han recibido las felicitaciones de todas las entidades internacionales.
Los migrantes de la flotilla del Aquarius tienen ahora un permiso de residencia de 45 días y los que han solicitado asilo disponen de un periodo de acogida de seis meses durante el cual, además de este apoyo psicosocial y jurídico, seguirán un proceso de alfabetización para familiarizarse con el idioma. Transcurrido este tiempo comenzará la fase de integración en el que se atenderá su inserción laboral.
La titular de Igualtat ha explicado que mientras estén en Cheste se realiza dos recuentos diarios y que no hay diferencias notables en el número aunque no siempre hay los mismos refugiados porque tienen libertad de movimiento y tras «tantos días confinados en alta mar necesitan un poco de esparcimiento y salir a ver el pueblo o tomar un café».
Al respecto, ha señalado que todos son «muy conscientes» de que tienen que hacer las entrevistas y está «muy contentos y agradecidos». Así, ha comentado que el ambiente, pese a todo por lo que han pasado, es «muy bueno» y están «encantados» con poder seguir el mundial de fútbol. El triunfo de Senegal fue muy celebrado, ha apuntado.