La Fiscalía ha acusado al exdelegado municipal de Medio Ambiente en Arcos de la Frontera, Francisco Múñoz, de un delito de malversación de caudales públicos, falsedad continuada en documento mercantil y prevaricación. Los hechos se remontan a 2013 cuando el actual concejal de Ai-Pro en el Ayuntamiento arcense ordenó supuestamente a los operarios municipales que dispusieran la leña de medio millar de cipreses en troncos pequeños y cargasen a propósito los camiones municipales.
Asimismo, la Fiscalía implica a dos trabajadores que habrían transportado tal cantidad de leña hasta la parcela propiedad del padre del concejal, en el Pinar de la Plata, y no hasta la cancha de tiro donde habitualmente el Ayuntamiento deposita los restos de poda para darles algún uso público. Esos dos trabajadores que ejecutaban tareas en el camping habrían acordado con el concejal que los portes serían pagados «camuflándolos entre la numerosa facturación que se estaba realizando» con cargo a las obras públicas.
Por todo ello, la Fiscalía pide un total de dos años y tres meses de prisión para el exdelegado municipal de Medio Ambiente, la inhabilitación de cargos de responsabilidad pública durante ocho años y medio y una sanción económica. Isidoro Gambín, actual alcalde de Arcos ha preferido no pronunciarse al respecto hasta que no haya una sentencia en firme.
Además, según el documento del Ministerio Fiscal, los tres encausados deberían indemnizar al Ayuntamiento de Arcos con 2.240 euros por su responsabilidad civil en estos hechos, así como a pagar 480 euros por los portes cobrados con dinero público.
