La Asociación de familias solidarias para el desarrollo, coordinado por su presidente Juan Molina, ha facilitado la llegada de un autobús a la ciudad de Chiclana desde Ucrania con casi una treintena de personas, doce madres y diecisiete niños. Las familias de acogida esperaban con muchas ansias la llegada de los refugiados desesperados que han huido de su país hacia un futuro desconocido. Para dentro de dos semanas se espera la llegada de otro autobús con sesenta y cuatro refugiados más.
Ante el llamamiento que se realizó a la sociedad por el pueblo ucraniano, Chiclana ha respondido con una enorme solidaridad con estas personas que se han visto obligadas a huir por la guerra, dejando atrás sus hogares y sus seres más queridos. Incluso identidades y negocios están aportando su granito de arena, ofreciendo trabajo a las madres ucranianas para distintos sectores.
Las familias de acogidas que acudieron a Chiclana de diferentes partes de la provincia de Cádiz para llevar a sus hogares a los refugiados, se sienten muy emocionados por esta historia tan interesante que van a vivir y por eso animan a que más personas participen en esta iniciativa.
De momento, se les está facilitando una protección temporal para regularizarles sus documentos y papeles. De esta forma, podrán conseguir tanto un permiso de trabajo como de residencia, donde se les garantizará poder escolarizar a sus hijos y ser atendidos en centros sanitarios.