La Policía Nacional ha desmantelado en Sanlúcar de Barrameda (Cádiz) dos plantaciones de marihuana instaladas en dos viviendas ubicadas en un chalet, en una operación que se ha saldado con la detención de un padre y su hijo, de 70 y 37 años de edad respectivamente, ambos vecinos de la localidad sanluqueña.
Según informa la Comisaría Provincial en un comunicado, en el registro practicado en las viviendas se han intervenido 145 plantas de cannabis sativa dispuestas para su cultivo interior con todo tipo de maquinaria para favorecer el rápido crecimiento de las plantas.
La investigación se inició a raíz de las informaciones obtenidas por los agentes sobre un chalet que estaba siendo utilizado para el cultivo de marihuana, pudiéndose comprobar ‘in situ’ el fuerte olor característico de esta planta en las inmediaciones del inmueble.
De este modo se procedió al registro de la casa de tres plantas, dividida en dos viviendas independientes ocupadas por los detenidos, localizando en la habitación originalmente destinada a salón de la vivienda 175 macetas recientemente plantadas. La segunda plantación se encontraba en el ático del inmueble, donde se localizaron otras 145 plantas listas para su recolección.
Ambas plantaciones disponían de todos los elementos necesarios para el óptimo crecimiento de las plantas en interior, como aire acondicionado, lámparas halógenas, riego por goteo, fertilizantes, aditivos específicos, filtros y aislamientos térmicos. Además la energía necesaria para el funcionamiento de estos sistemas provenía de un enganche ilegal que fue deshabilitado por operarios de la empresa eléctrica durante la operación.
RECOLECCIÓN PERIÓDICA CADA DIEZ SEMANAS
Junto a las plantas y los útiles de cultivo se intervino documentación que detallaba el proceso semana a semana para obtener plantas maduras y listas para su recolección con una periodicidad de diez semanas, determinándose a partir de esta documentación que al menos se había cosechado una plantación con anterioridad en el inmueble.
Padre e hijo, detenidos como presuntos autores de un delito contra la salud pública y defraudación de fluido eléctrico, al no tener antecedentes y una vez requisados todos los elementos necesarios para continuar con la actividad ilícita fueron puestos en libertad con cargos una vez fueron oídos en declaración en dependencias policiales.
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