Más de 70 toneladas de ayuda humanitaria se han conseguido alimentos no perecederos, 28 palés con medicamentos y material para abastecer distintos proyectos sociales, educativos y sanitarios llegarán al Sáhara gracias a la Caravana Solidaria 2018.
Colegios, asociaciones, colectivos y personas a nivel individual se han volcado un año más con este proyecto de cooperación impulsado por primera vez de forma conjunta por Amal Esperanza de El Puerto, Salam Paz de Cádiz, Sáhara Libre de Rota y Solidaridad del Campo de Gibraltar.
El proyecto cumple más de dos décadas, desde que en 1994 naciera cargado de solidaridad con el pueblo saharaui y un firme compromiso para abastecer a la población refugiada en el desierto de Argelia, donde sobrevive gracias principalmente a la ayuda internacional y a la gran capacidad que ha tenido a la hora de organizarse y persistir en su derecho a la autodeterminación y la vuelta a sus tierras.
Importante una vez más ha sido el llamamiento por parte de Amal Esperanza a la acción de los gobiernos para “de una vez por todas saldar la deuda histórica que tiene el estado español con el Sáhara Occidental, porque después de 39 años de democracia no se ha hecho nada para solucionar el conflicto político que sufre este pueblo hermano”, aseguraba Manuel Basallote de la asociación portuense.
En esta línea precisamente hablaba también el concejal delegado de Participación Ciudadana en Rota, Antonio Franco, quien ha asegurado que con colaboraciones como estas los ayuntamientos estamos tapando las desvergüenzas de los gobiernos centrales, de todos los colores, porque ninguno ha hecho nada”. Por su parte el primer teniente de alcalde de Cádiz, Martín Vila, destacaba la idoneidad de no dejar en estos momentos de hablar del pueblo saharaui, “estamos en un momento dulce con la resolución del Tribunal de Justicia de la Unión Europea dejando fuera de los tratados de Pesca las aguas del Sáhara Occidental. El alcalde de El Puerto, David de la Encina, agradecía la constancia de las asociaciones reconociendo que “poco o nada se ha hecho a nivel estatal”.
Ha sido el presidente de Amal Esperanza, Jesús Espinar, el encargado de desgranar todo el contenido de los tres camiones que parten al desierto del Sáhara, cargados de material para mantener en funcionamiento proyectos puestos en marcha en los campamentos, como es el caso del Centro de Atención Infantil de Dajla y el Centro de Discapacitados de Auserd. Amal Esperanza puso en marcha ambos proyectos hace ya unos años y el trabajo ahora se centra en dar continuidad con recursos y equipamientos.
También llegarán materiales destinados a los huertos familiares, puestos en marcha por la asociación portuense para facilitar y promover la autosuficiencia y el entretenimiento. En la actualidad Amal Esperanza trabaja con huertos familiares en los asentamientos de Auserd y Dajla.
El edificio público de Um Dreiga, en Dajla, recibirá mobiliario y material informático solicitado por el alcalde de la Daira, Namy Hadad, en el último viaje realizado durante el pasado mes de octubre. En ese mismo campamento la Unión Nacional de Mujeres Saharauis y la Escuela de Mujeres se verán beneficiadas de la Caravana Solidaria con material diverso para las actividades que realizan en su día a día, tanto en el ámbito de la política como de la cultura y lo social.
En Rabuni, el campamento refugiado donde se encuentra la sede del Ministerio de Salud Pública de la República Árabe Saharaui Democrática (RASD), se entregarán equipos sanitarios donados por la Fundación La Vicuña y material para centros escolares, guarderías y asistencia social para abastecer a la población en los cinco asentamientos refugiados.