Tras 16 años de obras, se ha hecho realidad una infraestructura que parecía que nunca iba a llegar a su fin. Se trata del tranvía de la bahía de Cádiz, el trambahía que esta mañana ha hecho su primer viaje institucional antes de que esta tarde comenzara a funcionar con normalidad, ya con viajeros deseosos de probar este nuevo medio de transporte.
Al acto de inauguración han acudido, entre otros, la ministra de transportes, el presidente de la Junta de Andalucía y el alcalde de Chiclana.
Parecía que nunca iba a llegar pero hoy se ha hecho realidad. El ‘Trambahía’ se ha puesto hoy en servicio para conectar los municipios de Chiclana de la Frontera, San Fernando, Puerto Real y Cádiz, con un trazado de 24 kilómetros y 21 estaciones y paradas, dando cobertura a una población servida de 234.000 habitantes, localizados a menos de 1.000 metros de distancia de una parada.
Esta mañana ha realizado el primer viaje inaugural institucional con la presencia, entre otros, de la ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, el presidente de la junta de Andalucía, Juanma Moreno, el vicepresidente de la Diputación y alcalde de Chiclana, José María Román, y directivos de ADIF y RENFE.
El viaje ha durado en torno a una hora desde Cádiz hasta las cocheras de Pelagatos en Chiclana donde se ha desarrollado el acto inaugural con la intervención de las autoridades institucionales.
Se trata del primer tren-tranvía de España al circular por vías de nueva construcción entre Chiclana y San Fernando ejecutadas por la Junta y, a partir del apeadero de Río Arillo (San Fernando), por la Red Ferroviaria de Interés General hasta Cádiz capital, en la estación de la Plaza de Sevilla.
Cabe recordar que la obra del ‘Trambahía’ arrancó HACE 16 AÑOS en 2006 y se vio interrumpida por problemas presupuestarios y por la falta de coordinación inicial con el Ministerio de Transportes y sus empresas públicas, ADIF, Renfe y la Agencia Estatal de Seguridad Ferroviaria (AESF), lo que provocó paralizaciones que retrasaron su puesta en marcha.
